Los Dealers enraízan su música y su ser en el más elegante y a la vez salvaje r&b británico de los 60, en el calor de los sótanos del Soho londinense donde Alexis Korner alimentaba la pasión negra de los jóvenes airados, pero también en la rural sencillez de los maestros norteamericanos del blues de los que absorben el alma que les mueve.