En el corazón del mítico “Tubo” Doña Casta nos ofrece una gran variedad de tapas, a cual más exquisita. Destacan sus croquetas de jamón, queso y nueces, de boletus y foie o de gallina trufada con chocolate. Los huevos rotos se preparan con jamón, gulas, foie, picadillo de ciervo o longaniza. La planta inferior nos presenta una bodega-comedor en la que la decoración fluye dentro de los elementos antiguos.