Hemos tenido la oportunidad de hablar con José Carlos Martínez (Cartagena 1969), uno de los bailarines y coreógrafos más reconocidos del mundo, estrella de la Ópera de París y anterior director de la Compañía Nacional de Danza.
Ahora, en su etapa como coreógrafo freelance, nos trae a Murcia, un año más, la Gran Gala de Navidad ‘Estrellas de la Danza’, los días 29 y 30 de diciembre, en el Auditorio Víctor Villegas. Para esta ocasión, este prestigioso cartagenero ha creado un programa muy especial cargado de novedades y sorpresas.
Este es el tercer año que se celebra la Gran Gala de Navidad-Estrellas de la Danza ¿Se ha convertido ya en una tradición? ¿Qué nos puedes decir de esta gala?
El primer año fue la sorpresa para ver qué iba a pasar y la verdad es que funcionó muy bien. El segundo año decidimos probar suerte con una gala más contemporánea, había menos danza clásica, y nos sorprendió la gran acogida del público de ese repertorio un poco diferente. Ahora la gala está ya establecida y es verdad que el público vuelve con ganas de ver más. Eso nos motiva para crear un programa bonito y con sorpresas cada año.
¿Qué novedades habrá en esta III Gran Gala de Navidad?
Para este año lo que he querido hacer es volver a algo más tradicional. Sigue habiendo cosas de danza contemporánea pero esta gala está dirigida hacia al ballet clásico y neoclásico. También he metido un poco de danza española pero más académica. El año pasado fue una mezcla entre danza española y danza contemporánea. Digamos que yo intento hacerla diferente cada año para fidelizar al público.
«La gente se espera ver lo que vio el año anterior y al ser algo diferente, le sorprende y se quedan admirados con la variedad»
¿Entonces no hay espectáculo igual?
No, cada año es distinto. Primero porque cada año vienen bailarines de compañías distintas así que vamos presentando al público nuevos artistas y sobre todo porque intento que la programación, en la parte artística, tenga estilos muy diferentes para que cada espectáculo sea único. Y que la gente tenga ganas de volver al año siguiente.
Este programa especial aúna el trabajo de grandes figuras de la danza ¿Cómo es trabajar con tantos bailarines de gran prestigio?
Es un placer porque todos son geniales, todos los bailarines tienen una calidad artística importante y bueno, a veces, hay que barajar los egos de unos y otros. Es lo que tiene tener un cartel tan impresionante. Pero es súper agradable, yo estoy acostumbrado a trabajar con artistas de alto nivel y sé cómo llevarlos para que no haya ningún problema y que el espectáculo sea lo más bonito posible.
«Los propios bailarines se van con ganas de volver a actuar en Murcia, al año siguiente»
Llevas varios años como director artístico ¿qué nos puedes contar de tu método de trabajo? ¿Cómo surgen las ideas para la coreografía?
Estos dos últimos años con el covid ha sido todo muy diferente a como es de costumbre. Ha sido mucho más difícil encontrar un elenco de bailarines, ya no sólo porque podría haber algunos que han tenido covid, sino porque en las compañías de danza están intentando proteger a los bailarines y es muy complicado que les den permiso para que vengan a bailar a este tipo de galas.
La manera de trabajar con los bailarines es la siguiente: yo escojo a alguien de los que conozco y sé que artísticamente puedo confiar en esa persona. Le dejo libertad para elegir lo que va a bailar y con quién lo va a bailar. Este proceso enriquece mucho la gala porque cada uno de los bailarines participa de manera artística en la composición del programa. Entonces no soy yo sólo, con mi único criterio, sino que todos ellos también cuentan.
Aprovechando lo que has mencionado antes ¿cómo ha afectado la pandemia al sector?
Ha sido terrible como en otros muchos sectores, además, nosotros los bailarines no podemos hacer teletrabajo. Todo tiene que ser en directo, en el momento que hay un problema no se puede resolver tan fácilmente. Entonces todo este tiempo ha sido con paradas, volver a empezar, volver a parar… Yo tenía una producción de Gisselle que se iba a estrenar en octubre de 2020 en Zagreb (Croacia) y al final estamos intentando realizarla en febrero del próximo año. Resumiendo, todavía no se ha estrenado el espectáculo y he estado más de tres meses ahí. Trabajando primero con muy pocos bailarines porque en el estudio de danzas solo podía haber 12 personas como máximo cuando el ballet lleva 40. Y así he tenido que ir prolongando el tiempo de trabajo para poder llegar hasta el momento del estreno.
¿Cómo es la preparación de un espectáculo de esta envergadura antes de una función? (Cuántos meses se ensaya, cómo se preparan los bailarines etc.)
Evidentemente los bailarines se preparan antes de venir. Los que tienen la costumbre de bailar juntos y ya tienen un repertorio muy hecho, necesitan menos tiempo de ensayo. Los que están creando algo nuevo o haciendo algo especial para la gala necesitan un mes de trabajo detrás.
Y luego en cuanto a la llegada, nosotros empezamos a trabajar en el teatro dos días antes porque está el diseño de luces y toda la parte técnica. Y luego, cuando llegan los bailarines el día anterior, ahí es donde se pone el trabajo de cada uno en común. Yo voy viendo lo que ha preparado cada uno de ellos y lo coordino todo para darle homogeneidad en el momento del espectáculo. Y el final, en el que bailan todos juntos, lo hemos trabajado un poco por zoom (como se suele hacer ahora). Yo les he enviado la música, ellos se graban en vídeo y luego lo vuelven a mandar. Cada uno viene de su país, entonces yo voy coordinándolo todo y les vuelvo a dar las correcciones.
«Los dos últimos días de trabajo son los más intensos porque se mezcla la parte técnica y la parte final del espectáculo donde participan todos los bailarines»
En este arte, ¿hay hueco para la improvisación?
Depende de la coreografía y del estilo que se baile. A mi me gusta dejar una parte para la improvisación o para que el artista tenga libertad de hacerlo. Además, hay dos galas y no son iguales. Es decir, hay una parte técnica y está escrito, los pasos están en la música y hay muchas cosas que van a ser iguales pero la sensibilidad del artista y la energía que tiene en ese momento va a ser diferente. Entonces sí que hay un cierto margen de libertad y bueno se puede decir que de improvisación.
¿Qué consejo le darías a un bailarín que está empezando?
Lo que tienen que saber es que hay que trabajar mucho sobre su cuerpo. Nosotros no somos como los músicos, no tocamos el piano o el violín, hay que tener la fuerza de voluntad de trabajarlo cada día. Es una larga carrera que lleva su tiempo y tener esa fuerza de voluntad, creo que es lo más importante. Y luego, pues disfrutar en escena que es esencial. Tienes que aprovechar ese momento porque todo el trabajo que se hace (un mes o un mes y medio para un espectáculo) se resumen a una escena de 10 minutos. Entonces esos 10 minutos tienen que ser mágicos.
“Cada vez que se va a escena hay que olvidarse de todo lo demás y disfrutar el momento”
Y por último ¿algo que nos quieras contar de tu relación con Murcia?
Toda mi trayectoria como bailarín y como coreógrafo se ha desarrollado fuera de nuestra Región y en realidad es ahora, en esta segunda parte de mi carrera, como coreógrafo freelance, que estoy organizando esta gala y estoy empezando a venir mucho más por aquí.
Yo digo siempre que soy español pero de cultura francesa porque me formé allí y ahora es cuando estoy descubriendo, en cierto modo, mi tierra y estoy de nuevo con mi familia. Es como la vuelta a casa.