La ciudad se vuelca durante diez días en la celebración de la Feria y Fiestas de la Virgen de San Lorenzo, patrona de Valladolid. El origen de esta imagen y su advocación se encuentran en una leyenda que relata como en el lejano siglo XI o XII un clérigo trajo a Valladolid la imagen de una virgen procedente de Consuegra para así protegerla de los musulmanes. Oculta un tiempo, posteriormente un pastor descubrió esa misma imagen a orillas del río Pisuerga, en una cueva extramuros de Valladolid cercana a la llamada Puerta de Aguadores; por ello fue conocida durante un tiempo como Virgen de los Aguadores. Después se la trasladó a una ermita dedicada a San Lorenzo, donde se la comenzó a reconocer a nivel popular como la Virgen de San Lorenzo. Dicha imagen de madera policromada, representa a María con el Niño Jesús en su regazo, con una datación en torno hacia la segunda mitad del siglo XIV.
El 21 de octubre de 1917 la imagen de la Virgen de San Lorenzo es coronada canónicamente y se la declara patrona de Valladolid fijando su festividad el día 8 de septiembre.
El sentir popular que siempre ha concitado tan venerable imagen, hacen que la ciudad y sus gentes se vuelquen durante 10 días en la Feria y Fiestas de Nuestra Señora de San Lorenzo, el acontecimiento festivo anual más arraigado en el sentir local y más deslumbrante en contenidos: conciertos, teatro, monólogos, magia, musicales, espectáculos infantiles, actividades de las peñas, atracciones, pirotecnia, degustaciones gastronómicas -Feria de Día- y exhibiciones artesanales, toros, verbenas y conciertos populares, sin olvidar la gran exposición industrial y comercial organizada como Feria Internacional de Muestras.