En un futuro distópico en el que gritar está prohibido, tres mujeres esperan la llegada de un autobús que las llevará al ‘Gritadero’, un lugar diseñado para que mujeres y hombres (en horarios distintos) puedan descargar sus gritos. Pero el autobús se retrasa y, en la espera, entablan conversación. Consumimos, ingerimos los días obedientemente. Como un medicamento evadimos el dolor, lo anestesiamos, y llenamos los silencios de ruido e imágenes para no escuchar, para no escucharnos. La libertad da miedo, todo está ya pautado. Nos movemos a la vez, muy rápido, sin tiempo para entender las normas, pero aceptándolas.
Con humor delirante, el dramaturgo francés nacido en Dakar, nos describe a través de estas tres mujeres una sociedad moderna de personajes alienados, armados, atiborrados a calmantes y a imágenes de sus propias vidas, pero al mismo tiempo ajenos a sí mismos y a sus necesidades. Una sociedad regida por normas absurdas, que recuerdan peligrosamente a nuestra propia realidad.
Personajes que esperan –sin saber qué pueden o no pueden hacer en su espera– en un mundo donde la comunicación está prohibida, “el otro” es el enemigo y el individualismo es ley. Personajes que desconocen las reglas del juego pero las juegan, que desconocen las normas, pero viven aferrados a ellas, temerosos de ellas, saltándose las prohibiciones por ser imposibles de cumplir, pero acatándolas en su imaginario. Personajes que se encuentran solos, aislados, centrados en sí mismos, pero sin verse. Al fin y al cabo para verse hay que mirarse en el otro.
Gritadero es una compañía formada por un grupo de mujeres. Sus proyectos, basados en la experimentación y la investigación, apuestan por la participación femenina y la colaboración con artistas de diversas disciplinas.
Teatro de la Estación
Sábado 20 y domingo 21 de marzo
Entrada: 16€
Bonificadas (pensionistas, estudiantes, parados y colectivos conveniados): 14€
DIRECCIÓN GRITADERO from Amanda Recacha on Vimeo.
