Hay multitud de ejemplos de tuits que destacan el viaje religioso de Justin Bieber. ¿Por qué la gente se preocupa por la fe de Bieber? La respuesta, a decir de los estudiosos de la religión, es que Bieber, igual que Kanye West o Chris Pratt, es una celebridad cristiana.
La escritora y periodista cristiana Laura Turner dijo: «Justin Bieber, Pratt y Kanye West hacen parte de una multitud de primera, y parecen hacer que el cristianismo sea interesante y relevante».
Celebridades como Justin Bieber son una marca
Los practicantes famosos, como el cantante canadiense, parecen buenos para la marca del cristianismo. La gente asume que el poder de las estrellas alimenta nuevas conversiones. «Esto es lo que lleva a los fanáticos seculares a la iglesia», comentó Turner. «Cuando los cristianos ven a personas con grandes plataformas que ensalzan las virtudes del cristianismo evangélico, se emocionan mucho».
Ese ha sido el caso durante décadas, según Richard Flory, director senior de investigación y evaluación del Centro de Religión y Cultura Cívica de la Universidad del Sur de California. Incluso antes del auge de las redes sociales, los pastores destacaban a los miembros más famosos de sus rebaños, y «esto ha sido parte del evangelismo durante mucho tiempo», asegura Flory.
Por qué influyen los famosos en el cristianismo
Los cristianos creen que las celebridades les dan «legitimidad cultural», lo que es especialmente valioso en un momento en que la religión organizada en los Estados Unidos está en declive, en opinión de Flory. Pero ¿las celebridades cristianas son realmente buenos misioneros? Turner, Flory y otros expertos en religión tienen sus dudas. «Nunca entrevisté a nadie que dijera: “voy a esta iglesia porque fulano de tal va allí”, afirma Flory. «Son más bien una especie de marca».
¿La fe de celebridades como Justin Bieber hace crecer la feligresía?
Pocos jóvenes tienen acceso al mismo tipo de glamurosas iglesias cristianas a las que asiste la mayoría de las celebridades, puntualizó Turner. Además, es una exageración imaginar que los creyentes entran en su iglesia metodista o presbiteriana local simplemente porque su cantante favorito publicó en Instagram lo mucho que ama a Dios.
Para Trevin Wax, vicepresidente senior de teología y comunicaciones de LifeWay Christian Resources: «En lugar de tratar a las celebridades cristianas como si fueran evangelistas superiores, deberíamos pensar en ellos como personas que preparan el camino para los futuros misioneros».
«Las celebridades como Justin Bieber, pueden abrir la mente de las personas a la idea de asistir a la iglesia, pero rara vez logran que crucen la puerta», aseguró Wax. «Una celebridad abierta a la práctica de aspectos del budismo, por ejemplo, hace que esa opción religiosa sea más plausible a los ojos de sus fans, pero es solo eso,» dijo Wax.
Lo que dijo Justin Bieber
En esta entrevista subida a YouTube, Justin Bieber declaró algunas cosas interesantes, como las siguientes: «Para mí, lo que llevó toda esta transición a un nuevo nivel es que tuve que atravesar por una fase incómoda».
«Y es que el tiempo que estuve con este pastor en Nueva York, durante dos o tres semanas, llegué a sentir que no era lo suficientemente bueno. No creí estar a la altura de este tipo de personas tan “atrapadas”, y lo que sientes es bastante incómodo».
También confesó que su mamá lo crió como buena cristiana, sin embargo, a medida que crecía veía tantos cristianos “raros” que llegó a pensar que no quería ser cristiano. En cierto momento reflexionó y buscó a esos creyentes, «… pero con puntos de creencia y de fe completamente diferentes y superiores», dijo Bieber.
«Mi Dios está basado en el amor»
La mayoría de los cristianos dicen: «Voy a hacer esto para que Dios me ame» o «Voy a vestir así para agradar a Dios». Pero resulta que ese no es el Dios en el que Bieber cree, «porque mi Dios está basado en el amor, no mira cómo estás vestido y te amará sin importar lo que hagas».
«Si amo a mi novia, no voy a engañarla, porque la amo tanto, y así ella me amará bastante también, es algo como eso», aseguró Bieber. «Y es que cuando desarrollas una relación con Dios no quieres hacer esas cosas, no quieres juzgar, no quieres herir a la gente, porque es como si los amaras».
