En Barcelona, a finales del siglo XIX, un joven de diecisiete años trabaja en el taller de orfebrería de su padre, con un prometedor futuro en la talla de piedras preciosas. Cuando conoce a Isabel, hija de un aristócrata venido a menos, su vida da un vuelco pues será desposada con quien le ofrezca el diamante más grande que jamás se haya visto.