El Palacio Episcopal de Murcia (Región de Murcia, España) es un edificio histórico situado en el casco antiguo de la ciudad, sede oficial de la Diócesis de Cartagena. Edificado en el siglo XVIII, hoy es uno de los inmuebles más importantes del patrimonio monumental de la ciudad de Murcia.
El actual Palacio Episcopal inició su construcción en junio de 1748, impulsada por el obispo Don Juan Mateo, con maestros locales vinculados a Jaime Bort, como Pedro Pagán, José Alcani y Martín Solera.
Durante la Guerra de Independencia Española, cuando las tropas francesas del general Soult entraron en Murcia sometiéndola a un brutal saqueo, utilizaron el Palacio Episcopal como Cuartel General.Así mismo, cuando la ciudad recibió la visita de Isabel II en 1862, el palacio sirvió de residencia a la monarca, al igual que cuando Alfonso XII viajó a Murcia ante los trágicos efectos de la riada de Santa Teresa de 1879.
El Palacio Episcopal es un magnífico ejemplo del estilo rococó, de planta cuadrada, entre italiano y francés de sobrios volúmenes y delicada gracia decorativa evidente en sus bellas portadas.
Fue Baltasar Canestro quien aportó la riqueza de escudos frontales, curvos y triangulares, los detalles de los frisos y la decoracíón al fresco; sobre todo en la fachada principal, muy del gusto italiano.