Como ya es habitual cada mes, el Museo Paleontológico de Elche expone una nueva pieza en su área ‘Los Secretos del MUPE’. En esta ocasión se trata de una réplica de un ictiosaurio, un reptil marino con aspecto y hábitos parecidos a los delfines actuales. Este ejemplar procede del yacimiento alemán de Holzmaden que, con 187 millones de años de antigüedad, ha proporcionado abundantes especímenes articulados completos de excepcional belleza y estado de conservación.
De hecho, el grado de conservación de Holzmaden es tal, que en el yacimiento apareció un ejemplar de una hembra en el momento de parir. Este aspecto ha aportado información biológica única. Y es que gracias a este relevante hallazgo se sabe que los ictiosaurios eran vivíparos y que parían a sus crías con la cola por delante y no por la cabeza.
Los ictiosaurios vivían en mar abierto y se alimentaban de peces y cefalópodos, siendo uno de los reptiles más abundantes en la época de los dinosaurios.
Con la exposición de esta nueva pieza, el Museo Paleontológico de Elche pone al alcance de los visitantes parte de los fondos del Museo ilicitano, los cuales ascienden a cerca de 60.000 ejemplares fósiles. Esto convierte al MUPE en un museo con un rico patrimonio paleontológico que abre sus puertas para difundir y compartir con la sociedad todo su conocimiento.
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