Este establecimiento está actualmente cerrado
Paseando por la Paloma después de la Catedral, nos encontramos con el 24.
Comida de fusión que combina elegantemente la calidad y la imaginación con toques tradicionales.
Un luminoso y atractivo local vestido con la seriedad de la piedra y el calor de la madera mezclado con tonos suaves y relajantes.
Cocina imaginativa y personal, con cambios diarios a tenor de la cesta de la compra, el mercado y la temporada.
Si eres amante de la carne poco hecha, no dejes de probar su Steak tartar, un plato muy especial que no se puede pedir en cualquier restaurante. No te lo pierdas.